Desde su nacimiento, la iglesia de Cristo ha estado sometida a todo tipo de presiones y persecuciones tanto en el plano natural como en el plano espiritual. Una de las luchas más fuertes que la iglesia (columna y sostén de la Verdad) ha tenido que librar es contra la corrupción de sus principios y fundamentos. Desde los primeros días de la predicación del evangelio a la gentilidad (es decir, los no judíos), surgieron dentro del seno de la iglesia corrientes de pensamiento influenciadas por la cosmovisión de la época. Es por esa razón que encontramos en las cartas apostólicas del Nuevo Testamento los diferentes señalamientos hacia los “pseudocristianos” que estaban corrompiendo la Sana Doctrina con sus “ideas novedosas”. Hoy en día la realidad de la iglesia no es muy diferente a sus inicios. Es por esa razón que MINISTERIOS ROCA ETERNA tiene un compromiso honesto con los principios de aquello que el apóstol Pablo, guiado por el Espíritu Santo llamó: LA SANA DOCTRINA.